miércoles, 11 de febrero de 2009

Semana 4: Alex Soto

Mis 14 años fueron un poco agitados. Recuerdo que ese año mi amiga Ale me dijo que cambiaba de novios como me cambiaba de calzones. Tenía razón… pero es que jamás pude evitar ser una soñadora. Siempre trataba de tener mi cuento de hadas y en cuanto veía que no funcionaban, salía volando a buscar el siguiente. Sí! Así de fácil era cuando tenía trece, ahora tengo que rezar para que aparezca uno siquiera!!!

Habían pasado dos años desde que me uní a los scouts y seguía teniendo los mismos amigos. Vivían todos en un mismo edificio así que era sencillo verlos a todos. Se habían unido a nosotros más personas de fuera, pero todos éramos un mismo grupo. Uno muy grande, a decir verdad, y todos los días teníamos algo que hacer.

Alex me pareció simpático desde el día que lo conocí, pero jamás me animé a acercarme porque era mayor que yo y porque sabía que le habían llegado a gustar dos amigas mías (pero mis amigas no sentían nada por él). Pasó el tiempo y los dos nos hicimos muy buenos amigos, conversábamos siempre, pasábamos la tarde haciendo nada y cosas por el estilo. Un día en una fiesta que teníamos con todos nuestros amigos le dije que me gustaba y todo el rollo. Sí! A esa edad no tenía vergüenza! Tenía unas agallas y una seguridad en mí misma… el hecho es que capté su atención y desde ese día mis amigas no existieron más, sólo era yo.

Lamentablemente la relación no fue bien. Se terminó a los tres días de empezada. Yo volví a ver a mi ex (Oscar) y me confundí. Me pareció que no era justo para Alex, así que corté. Seguimos viéndonos a menudo hasta hace unos años que se fue a vivir a España. Hasta el día de hoy somos amigos y sonreímos cuando recordamos aquellos días. El se ríe porque dice que “lo perseguí hasta España” porque allá conoció a una chica muy parecida a mí y ha empezado una relación con ella. Buena suerte Alex!

No hay comentarios:

Publicar un comentario